Cómo purgar los radiadores de casa

Introducción

Cuando llega el invierno, tener una casa cálida y confortable es esencial. Los radiadores son una de las herramientas más efectivas para mantener la temperatura adecuada. Sin embargo, un radiador puede no funcionar a la plena capacidad si no se ha purgado correctamente. En este post, te explicaremos cómo purgar los radiadores de casa para que puedas mantener una temperatura adecuada durante el frío invierno.

¿Qué es purgar un radiador?

Purgar un radiador significa eliminar el aire que se ha acumulado en su interior. Si hay aire atrapado en el radiador, el agua no puede circular adecuadamente y, por lo tanto, el radiador no podrá calentar la habitación. Por lo tanto, purgar el radiador regularmente es importante para asegurar su correcto funcionamiento.

¿Cómo saber si un radiador necesita ser purgado?

Hay algunos signos que indican que un radiador necesita ser purgado. Uno de ellos es si el radiador está caliente en la parte inferior, pero frío en la parte superior. Esto significa que hay aire en su interior que está evitando que el agua alcance toda la extensión del radiador. Otro signo es si el radiador tiene un ruido burbujeante.

¿Cómo purgar un radiador?

El proceso para purgar un radiador es bastante sencillo. Sigue los siguientes pasos:

1. Apaga el sistema de calefacción.
2. Deja enfriar el radiador.
3. Localiza la válvula de purga en el radiador. Por lo general, se encuentra en la parte superior del radiador.
4. Coloca un paño debajo de la válvula de purga para recoger el agua. Esto evita manchar la alfombra o el suelo.
5. Gira la válvula de purga con una llave o un destornillador hasta que escuches el sonido de aire saliendo del radiador. Al mismo tiempo, deberías ver cómo sale agua del radiador. Cuando la purga se complete, debería dejar de salir aire y el agua tendría que fluir libremente sin burbujas de aire.
6. Finalmente, cierra la válvula de purga y enciende el sistema de calefacción nuevamente.

Conclusión

Purgar los radiadores de tu casa es una tarea rápida y fácil que asegurará que calienten a su máxima capacidad. Ahora que sabes cómo hacerlo, ¡puedes disfrutar de una casa cálida y acogedora durante todo el invierno!